Fiestas en Torno a San Sebastián.

El Rincón Cofrade. Jose Manuel Carril. En torno al día de San Sebastián, los días 19 y 20 de enero, en Piornal (Cáceres) se celebra la fiesta de Jarramplas, personaje cuyo origen se remonta muchos siglos atrás.

Se desconoce su origen exacto aunque existen varias teorías al respecto, desde mitológicas por la celebración de ritos de fertilidad y de expulsión del invierno que tendrían su origen en clanes vetones, así como quien creen que su origen se basa en las ceremonias vistas por los primeros conquistadores de América entre los indios...
Algunos creen que Jarramplas fue un guerrero cristiano despreciado por el pueblo por pasarse, en época de dominación musulmana, a las tropas árabes, y otros opinan que pudo ser un mártir que los judíos mataron por no renegar del cristianismo. Sin embargo la teoría mas extendida y aceptada entre los propios habitantes de Piornal es aquella en la que se habla del personaje como un ladrón de ganado que es sometido al castigo y las burlas de los convecinos tras ser descubierto.

En la actualidad, llama la atención el vínculo que ésta mítica tradición tiene con San Sebastián. Sin duda la Iglesia Católica supo comprender el profundo arraigo social de esta costumbre popular y adaptó sus ritos y símbolos a su propio calendario festivo.

El traje de Jarramplas lo componen chaqueta y pantalón blancos, de los que cuelgan una infinidad de cintas multicolores. La máscara tiene forma cónica, dos cuernos laterales, cerrados, voluminosos, y una enorme nariz. Del vértice superior de la máscara cuelga una cola de crin de caballo. Un correaje cruza los hombros y sostiene el tambor que apoya en el pecho. A lo largo del año se confecciona el traje, las máscaras, las cachiporras y el tamboril.

El día 19 por la mañana Jarramplas se recorre el pueblo de casa en casa recaudando fondos para sufragar gastos de la fiesta, en concreto las tradicionales migas. El misterioso protagonista de esta fiesta toca el tambor por las calles de la población, mientras recibe una increíble lluvia de nabos, que los vecinos y visitantes arrojan sobre él mañana y tarde. Cuando cae la tarde, al toque de tambor tiene lugar el "Regocijo" o anuncio de la fiesta. La medianoche del 19 de enero es el momento para cantar las alborás, entre deliciosas migas y vino de pitarra que se ofrece a los visitantes.

El día de San Sebastián, desde la iglesia parroquial, Jarramplas vuelve a salir por la mañana y recibe los lanzamientos 'nabales' de todos aquellos que quieren participar en la fiesta. En este día los actos religiosos comienzan con la procesión de San Sebastián, y la comitiva religiosa se abre con una cruz plateada y el "Jarramplas" descubierto, sin máscara, caminando hacia atrás, seguido también de un coro de muchachas vestidas a la antigua, tal vez residuo de las bailarinas que interpretaban la "Danza del Jarramplas". Esa misma tarde, Jarramplas asiste al Rosario y Besapiés, a la subasta y la subida del Santo al trono. Durante años, los vecinos esperan para poder ocupar el puesto de Jarramplas y así cumplir una promesa o manda, soportando el castigo popular.
Esta fiesta del Jarramplas nos muestra toda una serie de elementos religiosos, folclóricos y simbólicos de indudable interés. 

Jarramplas se ha convertido a día de hoy en uno de los iconos festivos más reconocibles de Extremadura y en el personaje más internacional del Valle del Jerte. Tradición, sentimiento y alegría inundan Piornal cada enero invitando al visitante a adentrarse en los ritos, historias y leyendas de esta antigua y curiosa festividad ahora convertida en Fiesta de Interés Turístico Nacional.